Crucero costa norte de Menorca

Estrenamos nueva excursión a la costa norte desde Mahón.

 

Ya hemos estrenado nuestra nueva excursión con el Don Joan a la costa norte de Menorca, desde el puerto de Mahón el Don Joan zarpa los miércoles y los viernes rumbo a la Menorca más salvaje.

Recorremos el puerto de Mahón para atravesar su bocana y bordear la Mola con sus espectaculares acantilados siguiendo rumbo al norte hasta doblar sa punta de sEsperó llamada así por su gran parecido con una espuela, pues un esperó es una espuela.

 

Una vez en mar abierto pondremos rumbo a la bonita cala de Sa Mesquida la playa más cercana al municipio de Mahón y quizá la favorita de los Mahoneses, por el camino bordeamos la costa norte con sus negros acantilados que en invierno reciben los fuertes embates de la Tramuntana el viento del norte que azota Menorca durante el invierno y algún que otro día en verano.

 

Detrás de la Mola ya estaremos en mar abierto y las vistas son espectaculares, en el horizonte se juntan el cielo y el mar. Navegaremos junto a gran número de embarcaciones de recreo que también eligen el norte de Menorca para pasar un rato de descanso.

 

Los salvajes acantilados del norte de Menorca desde el Don Joan son un espectáculo, grupos de gaviotas y otras aves marinas danzan en el cielo junto a las rocas desafiando a las alturas y a veces a los fuertes vientos. Mientras disfrutas del espectáculo de la naturaleza Menorquina puedrás saborear un refresco o un helado en nuestra cubierta superior o si prefieres huir del Sol desde la cubierta inferior.

 

Tras rodear la Mola seguiremos hacia el Cap Negre pasando por el pintoresco Es Murtar un pequeño núcleo de veraneo de gente de Mahón. Los fondos marinos rocosos se ven salpicados de rincones donde el fondo arenoso se acumula dejando bellos rincones con aguas de color turquesa.

 

Después llegaremos a la bonita cala Mesquida a babor divisaremos el núcleo de Cala Mesquida donde gran número de menorquines veranean desde tiempos inmemoriales   salpicado de las típicas casas de borera como en el puerto de Mahón, así como las famosas cocheras donde tradicionalmente se guardaban las embarcaciones y que en temporada de verano se transforman en improvisadas viviendas de veraneo.

Junto a su orilla se encuentra un bella pradera de Posidonia, una planta marina endémica del mar Mediterráneo y que se encarga de limpiar y oxigenar el agua de nuestro mar  siendo la artífice de las tan cristalinas aguas de nuestras costas.

 

Esta Posidonia se acumula en tocones y sus largas hojas suelen danzar al son del mar un espectáculo precioso. A bordo disponemos de material de snorkel para poder contemplar la fauna marina que habita éntrelas hojas de la Posidonia Oceánica.

 

Los fondos de arena donde echaremos el ancla proporcionan un color especial a cala Mesquida, su arena dorada y gruesa le da unos bellos tonos turquesa al mar.

 

Allí disfrutaremos de un buen  rato de descanso para poder nadar y lanzarse desde nuestro tobogán. También podrás lanzarte al mar desde la popa del Don Joan y después relajarte al Sol en nuestra cubierta superior mientras nuestra experimentada tripulación de se encarga de todo.

 

Más tarde a la vuelta recorreremos el mismo camino hasta llegar a las boyas de la bocana del puerto de Mahón para disfrutar de nuevo de sus aguas y unas espectaculares vistas de Es Castell un bello pueblo fundado por los Británicos, el Lazareto construido hace ya mucho tiempo como hospital de infectados.

 

Más adelante flanquearemos la Isla del Rey donde los británicos construyeron un hospital y que actualmente es museo y sala de exposiciones.

 

Al atardecer el Puerto de Mahón brilla por los efectos del Sol y ciertamente es un espectáculo que desde el Don Joan te encantará, tras recorrerlo de nuevo amarraremos en el punto de partida.

 

En fin, una excursión para recordar donde además podrás disfrutar de la visión submarina del Don Joan.

 

Los miércoles y viernes zarpamos rumbo a lo más salvaje de la isla de Menorca donde la Tramuntana es la reina durante los meses de invierno y en verano un remanso de paz digno de recorrer.